Tarjeta roja a la violencia en el fútbol.
Los espectadores involucrados en robos y reyertas, o vinculados al tráfico de drogas, no pueden acceder al estadio Centenario de Uruguay gracias a un sistema de reconocimiento facial.
Misión
La seguridad en los estadios durante los partidos ha sido una cuestión de vital importancia durante muchos años. También ha sido un aspecto difícil de controlar para los clubes, las fuerzas de seguridad y las asociaciones de fútbol. En Uruguay, los robos, las reyertas y el tráfico de drogas son algunos de los problemas más importantes. Estos problemas han provocado que los aficionados pacíficos y familiares se alejen del fútbol como espectáculo deportivo. Por este motivo, el Ministerio del Interior estableció la obligación de que los estadios estén equipados con cámaras de seguridad, y concedió a la Federación Uruguaya de Fútbol (AUF) un plazo de cuatro meses para instalarlas.
Solución
Para poder supervisar de un modo eficiente lo que sucede en las distintas zonas del estadio, que tiene capacidad para 63 000 espectadores, el integrador H&O Tecnología Integrada colocó 15 AXIS Q6055-E Network Cameras en las secciones de gradas y palcos, así como 41 AXIS P1365-E Network Cameras en las puertas de entrada. Las cámaras de las zonas de entrada están integradas con el software Herta Security para permitir el reconocimiento facial de los aficionados.
En cada partido que se juega en el Centenario, los operativos de seguridad reciben avisos automáticos generados mediante verificación cruzada de antecedentes que permiten comprobar la presencia de alborotadores o personas que tienen prohibida la entrada al estadio, todo ello gracias a una lista unificada que mantienen la Asociación Uruguaya de Fútbol, el Ministerio del Interior y los clubes de fútbol. Este sistema permite efectuar 25 identificaciones faciales por segundo y adoptar las medidas necesarias. El estadio Centenario es pionero en la región en el uso de tecnología de reconocimiento facial con estos fines.
Resultado
Además de evitar la entrada de personas con un historial reciente de violencia en los estadios, el nuevo sistema está cambiando el comportamiento de los espectadores del fútbol en Uruguay. Después de ver hasta 200 personas detenidas en distintos incidentes en el mismo partido de fútbol, este número se ha reducido a una media de 10 detenciones por partido. Ahora el público sabe que, si algo sucede, habrá pruebas documentales y consecuencias. Esta nueva realidad ha animado a las familias con niños y adultos mayores —que, poco a poco, habían dejado de acudir a las gradas sentirse inseguras— a volver a disfrutar de los partidos de fútbol.
Pensamos que sería muy complejo, o que pasaría mucho tiempo hasta que pudiéramos presenciar un descenso en los índices de violencia por partido. Sin embargo, el sistema de cámaras funcionó a la perfección desde el principio, lo que nos ha permitido controlar —e impedir— el acceso de las personas que tienen prohibida la entrada.
Una respuesta rápida a un problema histórico
En Uruguay existe un gran entusiasmo por el fútbol. El escenario principal es el Estadio Centenario, toda una catedral del fútbol a escala mundial. Fue aquí donde se jugó el primer partido de la historia del Mundial en 1930. Uruguay fue anfitrión y logró coronarse como Campeón del Mundo.
Con el tiempo, este lugar donde la gente se reunía para disfrutar de un espectáculo pacífico de 90 minutos se había convertido en un punto de encuentro para ciertos grupos e individuos que no tenían ningún interés en el deporte. Esto llevó a buscar una solución de control de acceso avanzada basada en el reconocimiento facial.
“No sabíamos en absoluto cómo funcionaría el proyecto, y teníamos la exigencia del Ministerio del Interior de garantizar un entorno seguro para los espectadores y para los deportistas en el Estadio Centenario”, explica Andrea Lanfranco, secretaria general ejecutiva de la Asociación de Fútbol Uruguaya.
Una vez finalizadas las pruebas, el proyecto tardó cuatro meses en implementarse en su totalidad, incluido un centro de supervisión que opera 24 horas al día, todos los días del año, dentro de las instalaciones del estadio. "Todo esto fue posible gracias al gran esfuerzo realizado por nuestra asociación para afrontar la inversión; además, contamos con el apoyo de la FIFA y de la CONMEBOL", añade Lanfranco.
Germán Ruiz, director de H&O Tecnología Integrada que asesoró y supervisó a la AUF durante todo el proyecto, explica: “El plazo dentro del cual debía estar operativo el sistema de cámaras era de cuatro meses desde que el Ministerio del Interior emitiera la correspondiente orden. Eso significaba que, para optimizar la implementación, debíamos tomar decisiones muy precisas en cada etapa; y eso es exactamente lo que sucedió".
Seguridad en las entradas
Las 15 AXIS Q6055-E Network Cameras, que muestran lo que ocurre en las gradas de admisión general, plateas y palcos, han permitido reducir el número de efectivos de policía en las instalaciones.
A su vez, las 41 AXIS P1365-E Network Cameras ubicadas en las zonas de entrada permiten realizar con éxito 25 identificaciones faciales por segundo en tiempo real. Estos datos se cotejan con una base de datos que la AUF, los clubes de fútbol uruguayos, las autoridades policiales y el Ministerio del Interior actualizan conjuntamente en régimen continuo. Si se identifica a un sospechoso, el personal de seguridad recibe instantáneamente un aviso en el centro de supervisión.
Tras anunciarse la habilitación de tales sistemas de supervisión, las autoridades han observado una mejora en el comportamiento de los aficionados. Se ha convertido en una medida preventiva que permite detectar la presencia de cualquier persona o situación sospechosas.
Para Germán Ruíz, "las cámaras elegidas, junto con el excelente rendimiento del software Herta, nos han permitido obtener resultados satisfactorios y restablecer la tranquilidad a este espectáculo popular y de masas en este estadio, que es uno de los 15 mayores estadios de América".
Cabe destacar que además del éxito del proyecto en términos prácticos, esta implementación en el Estadio Centenario recibió el premio ALAS 2018 al Mejor Proyecto Privado concedido por la Asociación Latinoamericana de Seguridad, la principal organización que concentra a empresas de la industria de la seguridad en Latinoamérica y el Caribe.
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