Cada vez más organizaciones se esfuerzan por tener prácticas comerciales más sostenibles. Por ejemplo, algunos adoptan prácticas de la economía circular, un modelo económico sostenible que se centra en tres principios:

1. Excluyendo del diseño del producto aquellos materiales que pueden causar desperdicio y contaminación, y no pueden ser reciclados
2. Mantener los productos y materiales en uso durante todo su ciclo de vida, reparándolos en lugar de sustituirlos
3. Y finalmente, enfocándose en materiales, que pueden reciclarse una y otra vez sin perder calidad, como la mayoría de los metales

Si bien ser sostenible no es un objetivo fácil de lograr, es posible que se sorprenda al saber que su sistema de vigilancia podría ayudarlo en la dirección correcta. Sus cámaras de vigilancia, cuando se combinan con sensores, se pueden usar para monitorear automáticamente el entorno para que pueda ver dónde está ocurriendo el desperdicio de energía y ajustar cosas como el aire acondicionado y la iluminación según sea necesario. Por lo tanto, esto reduce el consumo sin que se requieran esfuerzos y recursos humanos adicionales.

4 formas en que puede ser más sostenible usando su sistema de seguridad

Veamos cómo funciona esto en la práctica. Aquí hay cuatro ejemplos de cómo las cámaras y los sensores pueden ayudar a:

• Mejorar el control de la contaminación atmosférica y acústica en las ciudades.
• Regular el consumo del agua.
• Optimizar los sistemas de iluminación y calefacción en un edificio.
• Proteger las especies en riesgo.

 

Mejorar la vigilancia de la contaminación atmosférica y acústica en las ciudades

La contaminación es un problema creciente en las áreas metropolitanas, por lo que los proyectos de ciudades inteligentes a menudo se esfuerzan por reducirla.

Por ejemplo, al usar una combinación de cámaras de vigilancia y sensores de IoT, es posible medir los niveles de contaminantes en el aire, el nivel de ruido y las vibraciones durante diferentes momentos del día en diferentes vecindarios. Las cámaras de red también pueden detectar cuando llueve o nieva y medir su intensidad. Estos datos, combinados con otras fuentes, ayudan a controlar el impacto de la lluvia y las nevadas en la contaminación y el tráfico.

Una vez que la ciudad tiene una idea clara del nivel de contaminación y sus causas, puede hacer mejores planes para abordarla y usar las mismas cámaras y sensores para verificar el progreso que están haciendo.

Regulando el uso del agua

Cada vez es más importante que las ciudades inteligentes regulen el uso del agua, un recurso que a menudo termina siendo desperdiciado.  Las tecnologías avanzadas e inteligentes, como la imagen térmica y las cámaras de red de luz visible, pueden ayudar a controlar el suminstro de agua y regular el consumo.

Por ejemplo, al regar un parque público, las cámaras pueden registrar el follaje y el suelo, la temperatura de las hojas de los cultivos y garantizar que los sistemas de riego automático tengan la capacidad de regular el uso del agua con mayor precisión.

 

Optimizando el consumo de energía

Supongamos que gestionas un edificio. Puede ser una oficina, una escuela o una tienda. Gran parte de su impacto ambiental probablemente se derivará del consumo de energía para iluminar y calentar las instalaciones. El análisis de video en cámaras de vigilancia se puede utilizar para optimizar este consumo mediante el uso de datos en tiempo real. Si una habitación está vacía, las cámaras pueden detectarla y cortar el suministro de calefacción e iluminación y mantenerlas solo en habitaciones ocupadas.

Sin embargo, apagar las luces no significa renunciar a la seguridad. Las cámaras se pueden equipar con sensores que tienen una sensibilidad a la luz excepcional y ofrecen imágenes nítidas y de color incluso en la oscuridad casi total. Las escuelas Rock Hill en Carolina del Sur utilizaron este método en sus campus, y lograron ahorrar miles de dólares en consumo de electricidad, mientras mantenían las instalaciones a salvo de intrusos.

Proteger especies en peligro de extinción

La actividad humana descontrolada amenaza la extinción de un millón de especies animales en el planeta. Para preservarlos para el futuro, las especies en peligro de extinción necesitan toda la protección que puedan obtener.

Por ejemplo, el perímetro de un santuario de rinocerontes en Sudáfrica está siendo protegido de los cazadores furtivos por una red de cámaras térmicas, que pueden detectar el movimiento a una distancia de hasta 300 metros, incluso en la oscuridad total, y generar alarmas tempranas tan pronto como sea sospechoso. Se detecta comportamiento.

Combinado con altavoces de bocina de red para disuadir a posibles intrusos, esto lo convierte en una primera línea de defensa crucial y garantiza que los guardaparques estén un paso por delante de los cazadores furtivos en todo momento.

Estos son solo algunos ejemplos de cómo las cámaras pueden ayudarnos a construir un mundo más sostenible para las generaciones futuras. Si desea saber más sobre cómo está contribuyendo Axis, eche un vistazo a nuestro último Informe de sostenibilidad.

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